Gallery

header ads

Ayotzinapa


Juan López

   La trifulca de Ayotzinapa, con el saldo de dos jóvenes muertos, otros heridos y más detenidos, no debe ser la imagen con que se caracterice al régimen que gobierna Guerrero. Nunca antes, en ninguna otra administración, a este turbulento campus académico, se le puso tanta atención y se le facilitaron sus demandas y peticiones. Incluso el gobernador Ángel Aguirre Rivero personal y recientemente acudió a las instalaciones normalistas en Tixtla, para dialogar con los jóvenes y cumplirles sus solicitudes.
   La muerte es un fin terminante que no tiene recodos ni remedio. Pero si la origina un suceso provocador, un enredo perverso, una testarudez tumultuaria, un enfrentamiento imprudente con agentes jenízaros, que aprovechan la multitud para facilitar los saldos homicidas, entonces la escaramuza adquiere nominación criminal.
   Los sucesos deben ser esclarecidos a grado de certeza jurídica, moral y de acuerdo a la perpetración de los hechos. Nada es tan necesario como la certidumbre que reclama la opinión pública.
   Ángel Aguirre Rivero ha sido desde abril un gobernante dado al diálogo y al acercamiento con las personas y sectores que difieren de su estilo personal de gobernar. Con los propios estudiantes de Ayotzinapa tiene antecedentes de proximidad y beneplácito.
   El luto de hoy es un garrafal y excesivo golpe a la civilidad. Una afrenta al régimen. Un exceso de fuerza. Un error que debe corregirse investigando, consignando y condenando a los autores,
los verdaderos, los infiltrados, los conspiradores, al castigo judicial que las leyes tengan asignado para estos transgresores.

   PD: “Todo abuso debe ser castigado”: Francois Voltaire.
------------------------------------------ VISITA TAMBIÉN MI PÁGINA WEB: www.trasfondoinformativo.com TIENE NUEVAS ENCUESTAS, NUEVAS SECCIONES, EL CLIMA, Y ESTÁ MEJOR ORGANIZADOS. GRACIAS.

Publicar un comentario

0 Comentarios