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La Novatada de Walton y la basura

Basusero a cielo abierto en la avenida Durango, colonia Progreso. FOTO: Trasfondo
El problema de la recolección de la basura le reventó en las manos al nuevo presidente municipal de Acapulco (apenas tiene dos semanas en el gobierno), Luis Walton Aburto, que no ha sentido lo duro sino lo tupido en estos pocos días en elm palacio del parque Papagayo.

La verdad es que no hubo una opeación adecuada en el trato con la principal empresa que se encargaba de recoger la basura en más de la mitad de las calles de Acapulco, que era dueña del total de los contenedores y que recolectaba a 180 empresas del puerto que ahora crean focos rojos de infección por toda loa ciudad.

Ese problema está poniendo a prueba al débil gabinete de Walton.

En primer lugar ese problema no tenía porqué haber reventado como reventó. Fallaron los operadores políticos. Nombres: El secretario de Finanzas, Antonio Sáyago, un viejito honesto pero sin experiencia en políticas públicas, que es donde se lidia y donde se aboga y donde se consiguen los recursos; el Coordibnador de Servicios Públicos, el inexperto Jesús Torres Aburto, que no tiene ninguna experiencia y está ahí por ser del mismo partido que el presidente, no supo qué hacer ante el inmenso problema que se le vino encima, ni sabrá.

La que debía ser la operadora política, la secretaria general, una abogada muy agradable y sin tacha, pero sin la experiencia de negociación que se requiere para frenar estos entre otros problemas mayores que se vendrán.

Pero si alguien falló, por segunda vez, fue el flamante ex alcalde de Fresnillo Zacatecas, traido como refuerzo mayor del débil gabinete, Rodolfo Monreal Avila, quien por haber sido ya alcalde, tenía ue haber asesorado al alcalde antes de que el problema estallara e incluso podr{ian haberle encargado a él las negociacines con Servitrán.

Servitrán es una empresa, que vende servicios y con ellos no se les puede acusar de que se fueron por intereses políticos, simplemente no supieron negociar con ellos. Para esa empresa es más caro recoger su equipo e irse y contratar un buen despacho de abogados que le cobre al Ayuntamiento hasta el último centavo, que haberse sentado a negociar, pero para que eso ocurriera se requería TACTO POLÍTICO que no loo hubo en esta novel administración.

Se ha filtrado por fuentes cercanas a esa empresa que el actual Ayuntamiento le ofrecía pagarle de aquí en adelante y lo atrasado negociarlo, sin proponerle un pago inmdiato de al menos una parte del atrasado, por lógica los emrpesarios dijeron ahí la dejamos.

La medida emergente de Walton de usar su terreno, frente al colegio Español, no fue una salida adecuada. De inmediato prendió las luces de alerta de que podría tratarse de un intento de hacer negocios particulares rentandolo al Ayuntamiento. Aunque esto no fuera así, en política la forma es fondo, es decir, el honesto no sólo debe serlo, también debe parecerlo.

Eso sin contar el grave problema de contaminación que se creaba en una zona tan céntrica y que de por sí es un problema por estar baldío en pleno centro de la ciudad y se presta a hablar de especulación de tierra urbana.

Aunque se corrigió a tiempo, el alcalde debe tomar medidas contra quien se adelantó y metió su imagen pública en ese brete. Lo principal que tiene walton ahora es su imagen y su capital político puede menguar con ese tipo de acciones atrabancadas.

Contratar volteos tampoco parece ser una salida adecuada pues transportar la basura a cielo abierto nos retrocede medio siglo en urbanismo y nos crea problemas de contaminación por toda la ciudad. Sus negociadores deben más bien llegar a un acuerdo urgente con una empresa especializada, pero ya. Podróan buscar de nuevo a Servitrán y pactar el pago a plazos con el apoyo del gobernador, o bien buscar ya el apoyo del gobierno del Distrito Federal, que ya pasó por esta misma situación.

En tanto, Luis Walton también mostró con este problema, además de la debilidad de su gabinete, una faceta no prevista: la falta de respaldo del gobierno estatal que encabeza Ángel Aguirre, que de por sí ha mandado señales no positivas desde la toma de posesión de Walton, donde se adueño del escenario, donde era un invitado más.

Y en ese terreno, en el de la política, Luis Walton tiene que afinar su actuación. Urge por ejemplo deslndarse de Andrés Manuel López Obrador, que de por sí le dio margen de operación al separarse formalmente de los partidos que formaron su coalición electoral y, urge, que deje atrás las rencillas políticas con la anterior administación y por el contrario, busque acuerdos con esa fuerza, para bajar recursos vía el Congreso y el propio gobierno federal.

De otra manera queda como un lastimero llamado en el desierto el llamado de los diputados de Movimiento Ciudadano, que dieron, por otra parte, una muestra de falta de oficio legislativo.

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