Miles de Acapulqueños siguen llenando la principal via turística del puerto con su peregrinar hacia la iglesia de Nuestra Señora de la Soledad que se ubica en el zocalo, ajenos a que la nueva catedral de la ciudad ya tiene su njueva sede en la avenida Universidad y a que la festejada es la virgen de Guadalupe cuyo santuario también se edificó en Universidad.
El peso de la tradición los lleva con su andar cansino y sus nostálgicas coplas acompañadas de trompetas desafinadas y viejos tambores por la costera Miguel Aleman, por donde caminaron sus antepasados antes aun de que esa via se pavimentara.
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