Aunque pidieron mantener el anonimato, pues saben que disentir del gobernador de Guerrero es riesgoso, explicaron que ya se notaron ayer mismo problemas viales en zonas donde se angosta la avenida Cuauhtémoc, a pesar de que para engañarlos, una escolta les iba abriendo paso, pues el recorrido duró alrededor de media hora, sin hacer ningún tipo de parada, desde el Papagayo hasta Caleta.
Dijeron que en la zona del IMSS clínica 9 y la del Vaquero Norteño y frente a 3 Hermanos, no queda más que un carril, para los miles de autos particulares y públicos que circulan en horas pico, y que la unidad usada para el recorrido es incluso un poco más ancha que los urbanos normales.
Añadieron que aunque se prevé que se retiren unas 4 mil unidades de transporte público, apenas representan la tercera parte de lo que circula actualmente, por lo cual esas zonas seguirán siendo cuellos de botella.
Por otra parte, explicaron que la mala calidad de los trabajos de pavimentación, realizada por el grupo Cemex, de Carso, propiedad del socio del gobernador, don Carlos Slim, quedó de manifiesto pues pudieron ver lugares donde el agua negra ya brotaba del nuevo concreto y que las banquetas quedaron destrozadas, así como postes caídos y tubería rota de la CAPAMA, sin considerar que ya hay sitios que se tuvieron que volver a abrir, lo que evidencia un afán por gastar en demasía, quizá para justificar un gasto o inversión de terminada.
Asismo, recordaron que en las pasadas lluvias ya se demostró que se crearon encharcamientos en donde antes no se hacían y algunos negocios se verán afectados, porque el arroyo de la calle lo dejaron más alto que las banquetas e hicieron un llamado al gobernador a reconsiderar y no poner por delante sus intereses económicos y no el buen funcionamiento de la obra pública. "Si ya le dio un negociazo a Slim, que al menos le diga que termine bien la obra", dijeron los denunciantes.
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