| Alfredo Guzmán Espinoza | 5 de septiembre de 2013 20:16 |
El voyerista
Por Alfredo Guzmán
Los vacíos políticos se llenan, con propuestas, con liderazgos o con carisma.
En el caso de la Universidad Autónoma de Guerrero (UAG) institución autónoma por antonomasia, muchos liderazgos, se desgastaron, otros entraron en desuso y los más, al ser mezquinos, pervirtieron a sus organizaciones y ahora ya son organizaciones atomizadas.
Líderes de la talla de Rosalío Wences Reza, Efraín Bermúdez Rivera, Pablo Sandoval Ramírez, Armando Chavarría Barrera y Gabino Olea Campos ya no se ven mucho.
Algunos líderes que aunque fueron rectores no alcanzaron el nivel de liderazgo que marcara espacios, circunstancias y momentos en la historia de la institución educativa de nivel superior, más importante del estado de Guerrero.
Un caso que empieza a ser paradigmático, por sus efectos y por los elementos que lo conforman, indican que Javier Saldaña Almazán, se está convirtiendo en un líder que empieza a conformar una imagen pública de poder. Dentro y fuera de la UAG. Aún sin definir una estrategia clara, ni efectiva, camina con una propuesta de imagen ambigua, pero que poco a poco, pudiera alcanzar elementos nodales. Aún no los tiene, ni hay quién se los defina. Pero aún es tiempo y es temprano.
Por lo pronto, nunca en la historia de la UAG, hubo un solo candidato en campaña. Ocurrió hoy.
Luego de la toma de protesta de todos los ex rectores, el primer evento era contra los aliados. Y venían los rompimientos. Ya era una práctica, que cuando eran trienios, el primer año, podía resanar heridas, el segundo gobernar y el tercero, se descomponía el escenario, por las campañas, sucesorias.
Hoy, Javier Saldaña Almazán ha logrado en estos pocos meses, unificar a la comunidad universitaria y hacerla parte del mismo concurso cívico social e institucional. No hay rompimientos aún. Tiene una imagen de esforzado atleta, que motiva y que promueve con hechos, una cultura deportiva, como nunca se había hecho. Ayer entregó la cuenta pública. Cuentas claras, chocolate espeso.
Todos los ex rectores, nunca hicieron caso a los rechazados. Nunca nadie les entregó propuestas inmediatas y se sentó con ellos a encontrar alternativas culturales y de estudios. Hubo huelgas de hambre y demás acciones, que dificultaron la relación. Hoy, no se conoce reclamo, más que el ya conocido, de quienes quieren ingresar a Medicina, a guevo. No hay cupo.
Los problemas que han venido surgiendo, los ha sorteado con prudencia, mesura y les ha encontrado con el concurso de los afectados, alternativas novedosas y de consenso
En el entorno de las relaciones públicas, ha estado presente en cuanto evento político social, le es permitido, sin hacer declaraciones ostentosas o que violenten la institucionalidad de la UAG.
También se roza con personalidades del mundo político local, estatal, municipal y nacional. La Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior y sus funcionarios, así como las autoridades de educación en todos los niveles, lo observan como un referente obligado, en cuando a analizar y resolver problemas académicos, financieros y sociales de la institución educativa.
El mismo gobierno estatal, lo observó con capacidades sobresalientes, cuando le ofreció que fuera Secretario General de Gobierno, cuando la pasada crisis del gobierno estatal.
Se le observa sereno, y dispuesto a seguir por esa senda, que le ha permitido desde abril, que fue electo, para un rectorado de 4 años, que apenas empiezan, pero que ya se empiezan a delinear las primeras acciones académicas e institucionales, que podrían cambiar para bien y para siempre sentar las bases de la nueva Universidad Autónoma de Guerrero. Así sea. Comentarios; subalterno1234@hotmail.com Y voyer54@yahoo.com.mx
Por Alfredo Guzmán
Los vacíos políticos se llenan, con propuestas, con liderazgos o con carisma.
En el caso de la Universidad Autónoma de Guerrero (UAG) institución autónoma por antonomasia, muchos liderazgos, se desgastaron, otros entraron en desuso y los más, al ser mezquinos, pervirtieron a sus organizaciones y ahora ya son organizaciones atomizadas.
Líderes de la talla de Rosalío Wences Reza, Efraín Bermúdez Rivera, Pablo Sandoval Ramírez, Armando Chavarría Barrera y Gabino Olea Campos ya no se ven mucho.
Algunos líderes que aunque fueron rectores no alcanzaron el nivel de liderazgo que marcara espacios, circunstancias y momentos en la historia de la institución educativa de nivel superior, más importante del estado de Guerrero.
Un caso que empieza a ser paradigmático, por sus efectos y por los elementos que lo conforman, indican que Javier Saldaña Almazán, se está convirtiendo en un líder que empieza a conformar una imagen pública de poder. Dentro y fuera de la UAG. Aún sin definir una estrategia clara, ni efectiva, camina con una propuesta de imagen ambigua, pero que poco a poco, pudiera alcanzar elementos nodales. Aún no los tiene, ni hay quién se los defina. Pero aún es tiempo y es temprano.
Por lo pronto, nunca en la historia de la UAG, hubo un solo candidato en campaña. Ocurrió hoy.
Luego de la toma de protesta de todos los ex rectores, el primer evento era contra los aliados. Y venían los rompimientos. Ya era una práctica, que cuando eran trienios, el primer año, podía resanar heridas, el segundo gobernar y el tercero, se descomponía el escenario, por las campañas, sucesorias.
Hoy, Javier Saldaña Almazán ha logrado en estos pocos meses, unificar a la comunidad universitaria y hacerla parte del mismo concurso cívico social e institucional. No hay rompimientos aún. Tiene una imagen de esforzado atleta, que motiva y que promueve con hechos, una cultura deportiva, como nunca se había hecho. Ayer entregó la cuenta pública. Cuentas claras, chocolate espeso.
Todos los ex rectores, nunca hicieron caso a los rechazados. Nunca nadie les entregó propuestas inmediatas y se sentó con ellos a encontrar alternativas culturales y de estudios. Hubo huelgas de hambre y demás acciones, que dificultaron la relación. Hoy, no se conoce reclamo, más que el ya conocido, de quienes quieren ingresar a Medicina, a guevo. No hay cupo.
Los problemas que han venido surgiendo, los ha sorteado con prudencia, mesura y les ha encontrado con el concurso de los afectados, alternativas novedosas y de consenso
En el entorno de las relaciones públicas, ha estado presente en cuanto evento político social, le es permitido, sin hacer declaraciones ostentosas o que violenten la institucionalidad de la UAG.
También se roza con personalidades del mundo político local, estatal, municipal y nacional. La Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior y sus funcionarios, así como las autoridades de educación en todos los niveles, lo observan como un referente obligado, en cuando a analizar y resolver problemas académicos, financieros y sociales de la institución educativa.
El mismo gobierno estatal, lo observó con capacidades sobresalientes, cuando le ofreció que fuera Secretario General de Gobierno, cuando la pasada crisis del gobierno estatal.
Se le observa sereno, y dispuesto a seguir por esa senda, que le ha permitido desde abril, que fue electo, para un rectorado de 4 años, que apenas empiezan, pero que ya se empiezan a delinear las primeras acciones académicas e institucionales, que podrían cambiar para bien y para siempre sentar las bases de la nueva Universidad Autónoma de Guerrero. Así sea. Comentarios; subalterno1234@hotmail.com Y voyer54@yahoo.com.mx
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