TRASFONDO
Julio Zenón Flores
El PRD dejó hacer al gobernador
Ángel Aguirre Rivero todo lo que quiso, incluso casi apoderarse del partido, al
grado de poner en la secretaría general del comité estatal a Jorge Salgado
Parra, hijo del secretario de Finanzas, Jorge Salgado Leyva, a quien por cierto
le detuvieron una camioneta en el DF con varios millones de pesos guardados en
cajas de huevo, sin que nada pasara.
Aguirre Rivero se apoderó de casi
un tercio de los consejeros en Guerrero del partido del sol azteca, por medio
de una organización denominada Izquierda Progresista de Guerrero (IPG),
suficiente para, con solo pactar con otra de las grandes corrientes, como lo ha
venido haciendo ya sea con el Grupo Guerrero o con la Coduc, ahora deslindada
de lo que fue la poderosa organización de Nueva Izquierda, para determinar no
sólo las posiciones de dirección en el PRD, sino además las candidaturas en el
consejo electivo, a celebrarse este fin de semana.
Aguirre, ahora está investigado
por desviación de recursos. Hasta ayer no había orden de aprehensión en su
contra, pero su nombre constaba en la averiguación previa como sujeto de
investigación y su futuro depende de lo que venga en el caso de corrupción
descubierto por las autoridades federales. Y sin embargo, se mueve. Sin
embargo, sigue teniendo el control del PRD en Guerrero, pues IPG tiene una
alianza con CODUC y con GG que le hace tener más del 70 por ciento de los
consejeros electivos, eso significa que con todo y todo, pese a estar con un
pie en la cárcel, será quien determine los próximos candidatos a gobernador, a
alcaldes, a diputados e incluso ya se repartieron los espacios plurinominales.
A menos claro está, que el comité
nacional, encabezado por Los Chuchos, de Carlos Navarrete Ruiz, se den cuenta
de que eso sería un suicidio para el partido del sol azteca y tome medidas de
emergencia ante una situación de emergencia: Lo correcto, si no quieren que
Aguirre Rivero sea el gran elector del PRD, es que el consejo electivo se
suspenda y sea la dirigencia nacional, en base a un acuerdo de las corrientes y
en base a un sistema de equilibrios, para cuidar el partido, el pedazo de
partido que aún les queda, quien determine las candidaturas por venir y
convoque, además a una nueva elección de consejeros.
Si el PRD nacional hace eso, que
se observa lógico, el tablero político de los aspirantes actuales se moverá de
manera determinante.
En primer lugar habría que, sin
juzgar aún, pro si como medida digamos cautelar, dejar en espera a los que
fueron funcionarios o miembros del primer círculo de Aguirre Rivero, quienes
pudieron haber tenido algo que ver con el desfalco y que en el futuro mediato
pudieran llegar a ser sujetos de investigación o de sanción legal por las autoridades.
En este momento, el PRD debería
mirar hacia gente que no ha tenido vínculos con los Aguirre, si es necesario
externos o recurrir a las corrientes que con dignidad se mantuvieron al margen
de las componendas con el ex mandatario.
Eso, si el PRD quiere rescatar
algo en el proceso electoral del 7 de junio…si es que se lleva a cabo.
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