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¿POR QUÉ NO RESPETAN EL REGLAMENTO DE TRANSPORTES EN ACAPULCO?

TRASFONDO



El poder de los 20 en el transporte público



Por Julio Zenón Flores



Con el cambio del director de Transportes en Guerrero, llevado a cabo el 11 de junio de este año, dejando fuera del cargo al aguirrista Juan Larequi Radilla y poniendo en su lugar al chavarrista Félix González Figueroa, gente de toda la confianza del gobernador Rogelio Ortega Martínez, se esperaba que se metiera en cintura a los transportistas que violan desde todos los ángulos la ley respectiva. Nos equivocamos. Siguiendo los pasos de su jefe el gobernador, González Figueroa se la lleva de a muertito, no hace ni deja hacer en la dependencia y los dueños y operadores del servicio público de pasajeros, siguen siendo una amenaza para el peatón y para el automovilista, pero en especial, para sus propios usuarios.

Por sólo mencionar cinco de los 17 artículos del REGLAMENTO DE LA LEY DE TRANSPORTE Y VIALIDAD DEL ESTADO DE GUERRERO, nos referiremos al ARTICULO 190 que establece que “los vehículos de servicio público de transporte de pasajeros, deberán exhibir en lugar visible la identificación del conductor que al efecto expida la Comisión Técnica de Transporte y Vialidad, la cual deberá contener fotografía reciente, nombre completo, datos que identifiquen a la unidad, ruta y número telefónico para quejas”, con la pregunta a mis tres lectores si es que alguno de ustedes han visto esta identificación a bordo de algún camión urbano o taxi en Acapulco.

En tanto, el ARTICULO 191. Que señala que “Los conductores de autobuses, combis y

minibuses deberán circular por el carril derecho o por los carriles exclusivos de las vías primarias (en el caso de Acapulco las avenidas como la Costera, la Cuauhtémoc, la Ruiz Cortinez, Bulevar Vicente Guerrero, entre otras) destinadas para ello, salvo casos de rebase de vehículos por accidente o descompostura. Las

maniobras de ascenso y descenso de pasajeros deberán realizarse, en toda ocasión junto a la acera

derecha, en relación a su sentido de circulación, y únicamente en los lugares señalados para tal efecto.

Los carriles exclusivos de las vías primarias solo podrán ser utilizados por los autobuses autorizados, así como por los vehículos de emergencia”, ¿alguien ha visto a uno de estos vehículos de transporte de pasajeros desplazarse sólo por el carril pegado a la banqueta?



Asimismo el ARTICULO 192, apunta que “los vehículos destinados al servicio público de transporte de

pasajeros deberán contar con pólizas de seguros de conformidad con lo dispuesto en el artículo 83 de la Ley

de Transporte y Vialidad, que cubran la responsabilidad civil por accidentes, así como las lesiones, daños y cargas que se puedan ocasionar a los usuarios y peatones y que presentarán ante la Comisión Técnica de Transporte y

Vialidad para tal efecto podrán contratar pólizas con compañías aseguradoras u organizaciones en sociedades mutualistas debidamente acreditadas que cuenten con el capital social suficiente para responder por todos sus miembros”, al respecto la pregunta sería si al menos dan al pasajero algún boleto para que pueda reclamar en caso de los frecuentes accidentes, sobre todo en los taxis del servicio colectivo, cuyos pasajeros lesionados son abandonados siempre a la buena de Dios.



El ARTICULO 203, que señala que “se prohibe que los conductores de vehículos de servicio público

urbano y suburbano cuenten con auxiliares, ayudantes o cobradores que afecten la calidad y eficiencia de dicho servicio público”, es otra joya que sólo sirve para comentar en los cafés.



Y finalmente el ARTICULO 204, que señala que “los conductores del servicio público de personas, deberán

prestar el servicio de manera eficiente, respetuosa y condiciones de higiene personal”, nos recuerda mucho a los taxistas que van en chanclas, bermuda, sin rasurarse y que hostigan a las damas que abordan sus unidades.



Ahí están, a la vista, sólo algunos de los artículos que si se cumplieran nos harían sentir en la gloria, pero que desafortunadamente solo sirven para que los inspectores de transportes, que últimamente están muy activos en las vialidades principales de Acapulco, hagan sus negocios de 20 en veinte. Como ellos dicen entre sí, con el Benito Juárez, ícono que el Banco de México que ilustra los billetes de 20 pesos que estos malos servidores públicos limosnean a os abusivos transportistas a cambio de otorgarles toda la libertad para que operen afectando al usuario, al que nadie defiende, y que se ve obligado a usar este tipo de transporte indigno de una ciudad turística como Acapulco, muchas veces con los resortes de los asientos lastimando la parte posterior del cuerpo de los pasajeros.

¿Qué hace falta? Que los usuarios compren a los funcionarios de transportes? O a los inspectores, o a los agentes de vialidad que solo saben estirar la mano? O que el pueblo se organice y queme algunos camiones y taxis de esos que prestan tan mal servicio, para darles una lección.

Que el director de Transportes nos diga…o que él ponga orden…si puede.

www.facebook.com/juliozflores










***Responsable del BLOG: Julio Zenón Flores. Periodista, escritor, marketer digital y maestrante en ciencia política. Premio estatal de periodismo y premio estatal de periodismo legislativo. www.facebook.com/juliozflores

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