Restauranteros, hoteleros y concesionarios de la zona federal y otros
empresarios, encararon al secretario de Desarrollo Urbano y Obras
Públicas (Sduop), Jorge Díaz Jiménez, a quien expresaron que el proyecto
del Acabús está demorando y afectando a sus negocios, por lo que
exigieron una fecha para ver el proyecto concluido.
En una asamblea citada por miembros de la Cámara Nacional de la
Industria de la Transformación (Canacintra) y la Cámara Nacional de
Comercio (Canaco), el subsecretario de la Sduop, Luis Mario Lavín; el
secretario de Desarrollo Económico, Enrique Castro Soto, y el
coordinador general del proyecto, Jeovel Guinto González, entre otros,
escucharon y contestaron las demandas de los comerciantes turísticos, en
las que expusieron que las obras del proyecto Acabús deben trabajarse
“día y noche” para afectar menos al tránsito vehicular por el
levantamiento del concreto.
Díaz Jiménez explicó que el proyecto del Acabús, que comenzó el 26 de
mayo de este año, no sólo traerá el beneficio de una imagen nueva a
Acapulco desde la entrada, sino que “acabará con los baches, se
reconstruirá el drenaje hidráulico y el concreto nuevo por donde
transitará el mismo Acabús”.
El comerciante José Alvarado Castillo opinó que la modernidad del Acabús
se está llevando a cabo sin el consentimiento de la población y que tal
vez los resultados no sean satisfactorios, ya que “lo mismo ocurrió con
el segundo nivel de la vía rápida que no sirvió para nada”.
Alvarado Castillo agregó que los gobernantes deben tomar en cuenta la
opinión de las personas, pues “no porque yo sea gobernador voy a poner
lo que yo quiera”, dijo.
A esto, Díaz Jiménez contestó que el proyecto está ocasionando que a su
vez se dé un ordenamiento y estructura, a través de la reestructuración
del drenaje y agua potable, por lo que el tiempo se extendió.
Añadió que el Acabús “no es un proyecto sacado bajo la manga o con fines
políticos”, sino que son obras que necesita Acapulco, pues “90 por
ciento de la población usa el transporte público”.
Asimismo, la comerciante Rosa María Chávez insistió en que se les
definiera una fecha en que el proyecto deberá estar concluido, ya que
“la avenida de la playa Tlacapanocha está cerrada y afecta a los
negocios de las orillas”.
Díaz Jiménez aseguró que para tomar en cuenta las opiniones de la
población en el proyecto, se instalarán módulos de quejas y sugerencias
en las avenidas principales como: el bulevar Vicente Guerrero, en la
Costera Miguel Alemán y en otras donde se están llevando a cabo las
obras.
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