TRASFONDO
Por Julio Zenón Flores
En el mes de septiembre de este año deben rendir protesta
los 46 diputados locales del congreso de Guerrero (o al menos 45 de ellos, ya
que hasta el momento no se sabe si será válida la votación en uno de los dos
distritos de Tlapa de Comonfort, en la Montaña alta), en donde, de acuerdo a
los resultados hasta ahora conocidos, el PRI contará con una cómoda mayoría al
haber obtenido más del 40 por ciento de la votación y unos 19 diputados de
mayoría relativa, más los de representación proporcional que la interpretación
que hagan de la ley los actuales consejeros del IEPC y magistrados del Tribunal
Electoral del Estado (TEE), le permita tener, conforme a lo que establece la
LIPEG, que señala hasta un 8 por ciento de sobrerrepresentación del partido que
obtenga la mayoría de las curules de mayoría relativa, que es un máximo de
tres.
Si el PRI no ganará más de 20 curules, entonces tendría
derecho a la cuota de los plurinominales, donde entraría el dirigente estatal
del tricolor, Ciahutémoc Salgado Romero, quien sin duda se convertiría en el
coordinador de la fracción; de otro modo, los 20 legisladores podrían ser
coordinados por una mujer.
El caso es que el gobernador Héctor Astudillo Flores tendrá
una cómoda mayoría entre los diputados del PRI y los cinco del PVEM, lo que sin
embargo le obligará a hacer alianzas para conseguir la mayoría calificada para
hacer reformas constitucionales.
Por ello el coordinador o coordinadora tendrá que ser
alguien de mucho oficio político y capacidad de generar consensos, pues hay que
hacer varias reformas que requieren del aval mayoritario.
Una de ellas tiene que ver con la seguridad, para adecuar
los ordenamientos estatales a la nueva legislación federal en materia de
delitos relacionados con el crimen organizado, otra también para cerrar el
asunto de la SEP-SEG-SNTE-CETEG, otra más para trasparentar la asignación de
contratos por parte de las dependencias estatales a los proveedores, con el fin
de cerrar la llave de la que se enriquecieron ilegalmente los Aguirre; está
pendiente también resolver sobre la propuesta de despenalizar el aborto y junto
a todo ello, debe darse una nueva reforma electoral, que cubra las lagunas
actuales en cuanto a distritación para la elección por mayoría relativa de los
regidores en los ayuntamientos, la revocación de mandato, tan necesaria, como
se demostró en el caso de Luis Walton en Acapulco o José Luis Abarca en Iguala,
entre otros, y que hagan menos costosas y más creíbles las elecciones locales.
La reforma debe incluir también el cambio de los actuales
magistrados del TEE y de los consejeros del IEPC, electos como cuotas de
partidos en el periodo del mayor control del aguirrismo, cuya influencia debe
ser desterrada de los próximos procesos sino queremos que en la siguiente
elección estén de regreso los Hughes y sus compinches.
Se deben establecer reglas muy precisas para evitar que
fuerzas ajenas o grupos de poder fácticos influyan en el resultado de la
elección, sanciones muy severas y concretas para quienes pagan por el voto y,
romper los candados impuestos a la libertad de expresión en los medios de
comunicación tradicionales, incluyendo en los llamados debates entre
candidatos.
Entre otros temas, el congreso nuevo tiene que sacar una
nueva reforma electoral, luego de que las anteriores ya fueron probadas al
fragor de las campañas actuales y se demostró que son insuficientes, pero
también, urge, una ley que regule la compra venta de espacios de publicidad
entre los medios de comunicación y el
gobierno, incluyendo la parte digital, que no está regulada actualmente, para
transparentarlo y evitar que los funcionarios, especialmente los del área,
creen sus empresas fantasma con las cuales desvían recursos de la comunicación
social.
www.facebook.com/juliozflores
***Responsable del BLOG: Julio Zenón Flores. Periodista, escritor, marketer digital y maestrante en ciencia política. Premio estatal de periodismo y premio estatal de periodismo legislativo.www.facebook.com/juliozflores
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