ARRANCA EN ACAPULCO CUMBRE DE IZQUIERDA; AMLO NO CONFIRMA

Enrique Vargas

Los dirigentes de los tres partidos de izquierda del país, PRD, PT y PMC, además de cinco gobernadores que ganaron sus posiciones postulados por esa alianza y en ocasiones con el apoyo del PAN, iniciarán hoy en Acapulco la llamada Cumbre de la Izquierda, aunque no se sabía si estará presente el candidato presidencial, Andrés Manuel López Obrador.
Lo que ya confirmaron su asistencia, además del guerrerenses Ángel Aguirre Rivero, anfitrión de la reunión, y que ya deben estar presentes en el puerto son Arturo Núñez, gobernador electo de Tabasco; Miguel Ángel Mancera, del Distrito Federal (DF); Marcelo Ebrard, que está por entregar la estafeta en la capital del país; Graco Ramírez, de Morelos y Gabino Cué, de Oaxaca.
Hay también la posibilidad de que acuda Mario López Valencia, gobernador de Sinaloa, además de que participarán todos los diputados federales y senadores, tanto los electos como los que están por concluir su gestión legislativa. Igual irán los diputados locales de Guerrero, electos y salientes, aunque los plurinominales perredistas están en espera de que los ratifiquen o los retiren de esa posición.
El invitado de lujo ya confirmado es el ingeniero Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano, quien se hs mostrado muy activo en la preparación de este reunión cumbre izquierdista.
Del candidato presidencial, AMLO, el gobernador Aguirre comentó que ya había hablado con él, pero ni confirmó ni negó la posibilidad de estar en esta reunión acapulqueña que se desarrollará este miércoles y jueves.
Los izquierdistas del país, que hasta ahora han fracasado en su intento de alcanzar la presidencia de la República, aunque tuvieron una respuesta más o menos aceptable para sus candidatos a las posiciones legislativas, deben analizar a fondo su desempeño y las causas de sus fracasos.
Deben aprovechar la reunión para hablar con claridad y tomar acuerdos, como aceptar la ratificación del triunfo del candidato priista Enrique Peña Nieto, en la contienda presidencial.
Deben convertirse en una izquierda moderna que pueda superar en lo necesario las pugnas y las diferencias entre las tribus o corrientes de opinión al interior del PRD, que los mantiene siempre desunidos y ocupados en confrontaciones internas.
Es obligado que definan su actitud ante la obsesiva actitud de López Obrador de insistir en anular la elección pasada, porque no hay elementos que justifiquen una medida de esa naturaleza.
Deben buscar la manera de que el político tabasqueño se acostumbre a competir con las reglas de las contiendas electorales, que no pretenda imponer sus puntos de vista sobre las leyes y sobre la opinión mayoritaria de los mexicanos, que decidieron darle su voto al priista.
La izquierda debe evolucionar y no estar sujeta a un liderazgo mesiánico que les hace más daño que beneficio, porque la actitud rijosa, necia, cerrada, autoritaria y extremista de AMLO seguramente les ha hecho perder muchos adeptos, gente que voto por ellos, pero que ya no toleran ni aceptan la actitud irreductible del Peje.
Su intolerancia insiste en que no hay más verdad que la suya, que las leyes deben estar sujetas a su capricho y que las resoluciones de los organismos electorales no tienen ningún valor si él no las acepta.
Si la izquierda y el PRD quieren avanzar políticamente deben buscar la manera de hacer a un lado a AMLO, de darles las gracias y mandarlo a su rancho, aunque eso se advierte bastante improbable, ya que aunque el PRD le mostrara el rechazo necesario, es seguro que buscará hacer de Morena su partido personal.
En fin, habrá que esperar a conocer los resultados de esta cumbre, a la que es muy posible que no asista el Peje, aunque habrá decisiones que no trasciendan porque las van a manejar en privado, para que no se ventilen públicamente, porque habrá quienes respalden a ultranza al tabasqueño, pero habrá otros que rechacen su negativo desempeño político.
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